Consejos para disfrutar al máximo el Jamón Ibérico
El jamón ibérico es un producto de alta gastronomía que se sirve de distintas formas para satisfacer los placeres culinarios más exigentes de la cocina internacional. Sin embargo, es también un producto sencillo en cuanto a la forma en la que llega a las mesas de los consumidores.
Para este momento, donde optimizar el tiempo en casa y la preparación de alimentos bajos en grasas dañinas son de gran importancia para combatir el sedentarismo, esta joya mediterránea también resulta ser una solución ideal.
Para disfrutar de todos los beneficios y placeres que nos brida, hay que seguir tres sencillos consejos:
1. TEMPERATURA:
Una vez que tenemos nuestras lonchas de jamón ibérico selladas al vacío, hay que conservarlas a una temperatura entre 2ºC y 5ºC. Importante que no se congelen o perderán sus propiedades.
2. TIEMPOS:
Existen dos tiempos que hay que respetar para obtener una degustación plena de esta joya del sur español. El primero, es sacarlo del enfriamiento dos horas antes de su consumo. El segundo, es sumergirlo un momento en agua templada y abrir el blister 30 minutos antes de servirse. Estas dos acciones dan como resultado que el jamón esté en su temperatura ideal (24ºC) para ser catado.
3. ASPECTO:
¿Cómo saber si nuestro jamón ibérico está listo para consumirse? Basta con mirar el color de la grasa que debe estar en un tono transparente, indicador de que está en su temperatura ideal.
Si bien el jamón ibérico está catalogado como un alimento para ocasiones especiales, hay que pensarlo también como uno de los pocos productos de alta gastronomía que son sencillos de maridar, acompañar o preparar, y así, hacer de cualquier ocasión algo especial.