Sombreros Jipijapa de Campeche, ¡Un accesorio más allá de lo artesanal!
- Para su creación se requieren hornos, cuevas y cenotes, así como la destreza de los artesanos
Más que un proceso artesanal, la fabricación de los sombreros de Bécal en Campeche, son una maravilla que conjuga la similitud con los ciclos astronómicos que los antiguos mayas consideraban sagrados. Al igual que el sol, comienza bajo tierra, con la germinación de la palma de jipijapa y su tránsito hacia las profundidades. Allí, como los personajes míticos, esta palma fibrosa es transformada para luego salir de las profundidades con la única finalidad de seguir al sol, de mirar al cielo.
Por más simbólico y ancestral que parezca este procedimiento, la fabricación de sombreros panamá de jipijapa tiene poco más de un siglo de existencia en Bécal. Aunque foránea en su origen, la tradición del jipijapa bacaleño ha ganado renombre gracias a la destreza de sus artesanos, quienes cultivan la palma, la cuidan y cortan en delgadas fibras.
Una vez conseguida una buena cantidad de fibras, la madeja o hilo obtenido se hornea para deshidratarla y conferirle su característico tono marfil; si se desea, es este el momento de teñirla. Fuera del horno, las fibras se cuelgan al sol para secarlas, y logrado lo anterior se introduce en las cuevas y cenotes que muchos de los habitantes de Bécal resguardan en sus patios y casas. La finalidad de esta inmersión bajo tierra es brindarle la humedad necesaria para manipular la fibra.
Mientras tejen los dedos de los artesanos se entrecruzan con tal velocidad que es casi imposible capturar la maniobra con la mirada. Por breves periodos despegan los ojos del tejido, pero ello no parece afectar producción; sus manos poseen vida propia y continúan el entramado sin errores, sin vueltas atrás. Aquí se comprueba que tejer jipijapa requiere cabeza, destreza, pero también corazón. Terminada la pieza, se lleva a una prensa especial donde, al calor del hierro y el gas, es comprimida por apenas unos segundos hasta lograr la forma final del sombrero.
No sólo se trata de un accesorio, se contempla un trabajo artesanal que requiere pasión, dedicación y creatividad por todo el contexto que representa su ejecución. Desde luego si
tienes pensado visitar Campeche, no olvides adquirir un sombrero jipijapa que seguramente le dará un toque especial a tu outfit playero y de paso apoyarás al talento local de la región.
Visita la tienda Lool-Jipi de Alfredo Uicab, donde podrás presenciar todo el proceso de elaboración de los sombreros. Calle 30 #231, entre 37 y 39, Bécal.
Los precios varían de acuerdo con el valor artesanal desde $250 a los $3500.
Información proporcionada por la Secretaría de Turismo del Estado de Campeche.